Para adentrarnos en el tema, cabe poner en claro lo que es
específicamente la Proyección Astral, cuáles son los métodos para
conseguirla, y para que sirve.
En primer lugar hay que diferenciar a la Proyección Astral, propiamente
dicha, de la Proyección Mental.
La Proyección Mental es un elemento básico y necesario para llegar a
una buena Proyección Astral.
La Proyección Mental se compone básicamente, en primera instancia,
de imaginación. La imaginación es la capacidad creadora de nuestra mente.
La imaginación construye el pensamiento, y da lugar a las ideas que
más tarde se convertirán en realidad.
La imaginación es la base, pero necesita de un pensamiento lógico y
ordenado que esté dispuesto a poner en práctica las ideas, ya que esta es la
única forma de descubrir si lo que imaginamos tiene cabida en el mundo real.
Cuando a la imaginación le falta el apoyo ordenado del pensamiento, se
pierde por los caminos de la fantasía disparatada, sin llegar a concretarse en
nada, y esto en el mejor de los casos. Ya que una imaginación disparatada
puede llevarnos también por el camino de la superstición, el fanatismo y la
imbecilidad.
Cuando la imaginación es creativa y encuentra el apoyo del
pensamiento, sobreviene entonces la Proyección Mental, para la que se
requiere un mínimo de atención y concentración.
No debemos confundir a la Proyección Mental, ni a la Proyección
Astral, con la autosugestión, la vigilia o la hipnosis. Simplemente, porque en
ninguno de estos estados actúa nuestro albedrío, mientras que en las
Proyecciones, Mental y Astral, la voluntad del hombre es imprescindible.
La voluntad es imprescindible, porque es ella la encargada de
mantenernos conscientes de nuestros actos y de nuestros pensamientos.
Una vez que se tiene la voluntad suficiente para ordenar pensando a
nuestra imaginación, es decir, una vez que podamos realizar una Proyección
Mental, estaremos preparados para realizar una Proyección Astral.
En la Proyección Mental, somos capaces de ver desde otro punto de
vista la realidad que nos rodea, mientras que en la Proyección Astral entramos
en contacto con una serie de símbolos y elementos simbólicos que escapan de
nuestra realidad inmediata.
La Proyección Astral tiene acceso a diversos planos y esferas Astrales,
podemos ir a encontrarnos con los Ángeles, o podemos hallarnos frente a los
Demonios, sin que corra ningún riesgo nuestra integridad personal.
Con la Proyección Astral se pueden estudiar diversas ciencias, y se
puede tener acceso al Archivo Akásico.
Por todas estas razones, los magos y brujos de todas las épocas han cultivado estas prácticas, ya que con ellas sus Rituales Mágicos han tenido, y tienen, una mayor consistencia.
Las técnicas y los métodos son también diversos.
Por extraño que pueda parecer, monjes budistas como los Shao-Lin se
privan de la vista para tener mayor concentración en el mundo espiritual, ya
que suponen que sus sensibilidades aumentan al dejar de percibir el grosero
mundo material que les rodea, deslumbrados por una luz que no es ni la
esencial, ni la verdadera.
En la altiplanicie mexicana, los Tarascos utilizaban el peyote como
medio de transporte hacia el mundo Astral. Aún hoy en día continúan usando
el alucinógeno en las ceremonias religiosas.
Los Yoguis consiguen dicho estado a través de las diferentes técnicas de
autodominio corporal, mental y espiritual.
En África y Oceanía, es la catarsis corporal y religiosa la que lleva al
desprendimiento del cuerpo Astral.
En suma, las culturas orientales, prehispánicas, negras y australianas, le
dan al Viaje Astral una dimensión mucho más elaborada, mágica y religiosa,
que las culturas colonialistas, es decir, las culturas occidentales de nuestro
tiempo.
En otras palabras, podríamos decir que en este sentido las culturas
occidentales han sido menos activas y más perezosas al momento de realizar
las experiencias.
Muchos de los conocimientos sobre las experiencias Astrales nacen
precisamente, para el ocultista occidental, en el Oriente. Las influencias del
Zen, el Budismo, el Tao, el Yoga, etc., más recientes de lo que se quiere
aceptar, han tenido mucha más influencia en el pensamiento Occidental, que
las supuestas reminicencias egipcias que se le suponen a todo el Ocultismo.
Es cierto que la Kabbalah y las enseñanzas caldeas tuvieron su
importante incidencia en el Ocultismo Occidental del siglo XVI, pero llegaron
ya bastantes filtradas a través del pensamiento griego e hindú de principios de
nuestra Era.
Las experiencias de Proyección Astral en nuestros días,
están llenas de sincretismos culturales, ideológicos y religiosos.
Los magos y las brujas del renacimiento usaron en sus Rituales el apoyo
de alucinógenos. Con ellos, además de alcanzar un disfrute corporal más
intenso, tenían la capacidad de contactar Astralmente con toda clase de
Espíritus, inferiores y superiores. Mientras que las Escuelas Esotéricas se
decantaron más por las catarsis de tipo “físico para alcanzar la sublimación del
Cuerpo Astral, utilizando refuerzos evocatorios de índole religioso, como los
africanos, pero sin llegar a los excesos corporales de los Yoguis.
Para algunos el hombre se divide en Cuerpo Físico, Cuerpo Mental y
Cuerpo Astral, mientras que para otros debe de añadirse en igualdad de
circunstancias al Cuerpo Emocional.
Para algunos la denominación Astral, o el acceso a las esferas Astrales
es el summum, mientras que para otros, después del plano Astral aún hay
esferas superiores. Todo ello en función de lo espiritual que sea el grupo.
Hay sistemas mucho más sencillos para alcanzar el desprendimiento
Astral fuera de la concepción clásica, que señalaba peligros por todas partes,
quizás en un vano intento de que los recién llegados no se enfrascaran en
dichas experiencias.
Como ya había indicado, la experiencia de la Proyección Astral no
reviste peligro alguno para las personas más o menos equilibradas y normales,
y su práctica, en realidad, no requiere ninguno de los fundamentos religiosos,
sectarios, alucinógenos, evocativos, físicos o de cualquier otra índole.
En realidad, para la Proyección lo único que se necesita es imaginación,
raciocinio, capacidad de concentración y fuerza de voluntad.
La participación en grupos o en parejas es recomendable, pero no
indispensable. Que duda cabe que nos sentimos mejor acompañados que solos
cuando nos vemos enfrascados en una experiencia sobrenatural, y que sin
embargo podría ser lo más natural.
Para que el lector se haga una idea de la Proyección Astral, le diremos
que su estado es parecido al sueño en estado Alfa. Cuando alcanzamos el
punto álgido en los sueños de desconexión con el mundo material, nuestro
cuerpo físico libera al cuerpo mental de su caparazón, y el cuerpo mental
libera de sus prejuicios y limitaciones al Cuerpo Astral. Entonces, el Cuerpo
Astral vaga libremente por el tiempo y el espacio, y aunque no somos
conscientes de ello, a menudo nos traemos al mundo físico los recuerdos de
nuestras máximas experiencias oníricas, que no son más que un
desprendimiento del Cuerpo Astral.
Algunas personas prefieren, en sus experiencias Astrales, desconectarse
del todo del mundo físico, mientras que otras prefieren mantener un hilo de
contacto con la realidad, porque consideran que de esta manera su Proyección
Astral es más consciente y dirigible.
Nosotros nos inclinamos por la segunda, simplemente porque sabemos
que en nuestra cultura la preparación física, mental y espiritual, están menos
desarrolladas que en el Oriente, y que por lo tanto, un último hilo que nos
conecte con la realidad nos permitirá realizar el experimento sin el medio del
no retorno.
El no retorno es el sentimiento que más temor nos proporciona. Los que
se encuentran bien aposentados, cómodamente en la vida, no tienen ningún
interés en quedarse anclados en la zona Astral antes de tiempo. Y los que no
se encuentran a gusto en la vida, buscan en ello un pretexto que les agrada,
pero que les asusta por su dimensión espiritual.
Quien defiende la idea de la reencarnación, tiene menos temor de la
experiencia. Quien piensa que esta vida es la “única se atemoriza más
fácilmente.
Hay personas que se han pasado la vida buscando una experiencia
Astral que les confirme de una vez por todas la existencia real de una vida a
nivel espiritual, sin conseguirlo. Mientras que otras personas, han tenido y
tienen constantes experiencias de desprendimiento de su Cuerpo Astral, que
incluso les molestan. Ya porque ello les desconecte a menudo de la realidad,
ya porque sus ideas religiosas no estén acordes con la idea de Viajar
Astralmente.
Aunque insistimos, es recomendable la experimentación en grupo, entre
otras cosas, porque se pueden compartir los resultados y los diferentes puntos
de vista.
La posición más cómoda para realizar una Proyección Astral es la
horizontal, aunque se puede realizar en posición de Loto, sentado, de pie, etc.
Y la habitación, no necesariamente tiene que ser una oscura llena de símbolos
mágicos, con que sea una habitación tranquila y con pocos ruidos basta.
No cabe duda que cierto tipo de elementos incentivan y dan un mayor
ambiente, pero insisto, no son absolutamente necesarios.
La idea de una Ritualidad en la Proyección Astral se desprende de los
Ceremoniales Mágicos, en los que se pretendía entrar en contacto con las
Inteligencias Superiores. La Proyección puede, e incluso debe ser metódica,
pero no necesariamente Ritual.
Tampoco es menester hacer el Viaje Astral bajo el patrocinio de un
Ángel o de un Ente Superior, si bien es cierto que se siente una mayor
seguridad y protección, cuando consideramos que alguien poderoso está de
nuestra parte.
La relajación y libertad de pensamiento si son necesarios. Toda idea
preconcebida puede manipular la experiencia.
Finalmente, y como punto exclusivamente técnico, el no cruzar las
manos o las piernas, le permitirán una mayor sensibilidad para la Proyección
Astral. Los diferentes mudras, o posiciones de las manos, son indiferentes, y
mientras algunos les dan gran importancia, otros los dejan de lado. Sin
embargo, el poner las manos en posición de rezar, o el unir los tres dedos
(índice, pulgar y corazón), parecen ser factores bastante efectivos.
Hay grupos que utilizan la cadenciosa y cálida voz de una grabación, o
la de un moderador en directo, simplemente para facilitar la disposición de las
personas que se prestan al experimento. Además, el saber que se cuenta con
un guía, da mayor seguridad al experimentador.
Recuerde que la Proyección Astral es una alteración álgida de los
sentidos y de la sensibilidad de los mismos, por ello le recomendamos, si es
usted una persona altamente sensible e impresionable, que lea, que se informe,
pero sin afanarse demasiado por realizar las experiencias.
En cada uno de los “Roles de Vuelo” iremos ampliando la información
y el significado de algunas prácticas y de ciertos simbolismos.
S. L. MacGregor Mathers
Fuente competa
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Proyección Astral – documentos-secretos
ANEXO A : Transferencia Cristal